Nuestro nombre como disparador para armar historias:
Casa
Anteojito
Mañana
Indios
Libro
Ambrosio
LA CASA DE ANTEOJITO, de Camila
Salió de su casa ¡muuuuy feliz!
Pero cuando iba para la escuela se tropezó con un charco de barro;
Anteojito dijo: -¡mi pullover de ambrosio! ¡Mi mamá me retara! Busco y busco una canilla, pero no encontró nada. ¡A las ocho de la mañana una lavandería abierta!
Tuvo que ir a su casa a cambiarse. Cuando llego, su mamá no estaba, se cambio y salió para la escuela. Muy feliz, y también muy triste.
Fin.